Dra. Amalia Arce

Diario de una mamá pediatra

  • Facebook
  • Instagram
  • LinkedIn
  • Twitter
  • Acerca de mí
  • Blog
  • En prensa
  • Servicios profesionales
    • Te ayudo en tu proyecto
    • Proyectos colaborativos
    • Consulta de Pediatría
  • Libro “Diario de una mamá pediatra”
  • En la consulta
  • Maternidad
  • Urgencias
  • Mis reflexiones
  • Nuevas tecnologías
Estás aquí: Inicio / En la consulta del pediatra / Con la teta hemos topado

Con la teta hemos topado

12/11/2014 por Amalia Arce 48 comentarios

En múltiples ocasiones me habéis oído defender la lactancia materna como la forma ideal de alimentar al bebé. Pero sin estridencias y sin criminalizar a las madres que optan por otro tipo de alimentación o que tiran la toalla por los motivos que sean. 
El hecho es que afortunadamente en los últimos años son muchas las madres que consiguen amamantar a sus bebés. Cada vez el acceso a la información y a los grupos de soporte parece más fácil y eso condiciona unas tasas de lactancia materna más elevada. A pesar de que el momento de incorporación al trabajo de muchas mujeres es un momento de inflexión en el que muchas lactancias empiezan a abandonarse, también los pediatras nos congratulamos sabiendo que son muchas las madres que pueden amamantar de forma prolongada, a veces hasta que el niño o la niña han cumplido dos o más años. 
Está claro que dar el pecho no es solo una cuestión de alimentación. El contacto íntimo que se establece entre madre e hijo es especial. El pecho además sirve para calmar al bebé, para ayudarle a dormir y en muchas ocasiones simplemente para mostrarle que su madre está allí.
Posteriormente el bebé se hace más mayor y empieza a desarrollar sus capacidades psicomotoras y a explorar el mundo. También se van introduciendo en su alimentación nuevos alimentos, hasta llegar al año de vida. Cuando el bebé cumple 12 meses se dice tradicionalmente que «puede comer de todo» y será en muchos casos capaz de explorar el mundo ya erguido y deambulando. 
En ese punto del desarrollo, la mayoría de bebés preferirán estar explorando el mundo antes que estar en brazos y en cuanto a la alimentación, también estarán en una fase de curiosidad por los alimentos, por las diferentes texturas y sabores, por la capacidad de ser ellos mismos los que tomen la iniciativa. 
Cuando el pecho se mantiene en esas edades puede adoptar diferentes funciones. Para unas madres será parte de la alimentación (postres, resopones, chupitos, etc). Para otras, sin embargo -a la par que para sus bebés- la teta seguirá sirviendo para todo. 
La teta consuela. Y mucho. Es verdad. Pero a veces, este servir para todo origina que no se enfrenten a la realidad de los conflictos cotidianos que se producen  en el día a día, y que pueden ser muchos en un niño pequeño que no es en realidad omnipotente….Por poner un ejemplo, en la consulta, comprendo que a un niño se le ofrezca el pecho si se le vacuna, pero no entiendo que en una visita simple (sin vacuna y sin técnicas dolorosas) haya que ofrecer el pecho 2, 3 ó 10 veces para que el niño se calme. No estoy hablando de bebés pequeños. Estoy hablando de esos niños, que ya son capaces de andar y que empiezan a tener sus frustraciones y sus miedos. Quizá irles explicando con un lenguaje adecuado cuál es el objetivo de la visita, qué va a pasar o quienes somos nosotros, a largo plazo sea más útil para paliar sus miedos que enchufarlo a la teta. En la teta se calmará, pero cualquier otra maniobra ese día o en días sucesivos, originará volver a empezar el bucle. Sin fin.
Sé que esta entrada puede levantar ampollas. Y me gustaría decir que respeto a las madres que así se comportan. Cada uno cría como cree que es mejor. Sin embargo mi experiencia «desde el otro lado» es que muchas de ellas, a veces unos meses más tarde piden consejo para destetar, o como mínimo para «desenganchar» un poco la relación. Para sentirse un poco más «libres» (tampoco es la palabra, pero no encuentro un adjetivo mejor), para que puedan entrar otras personas en la relación -por ejemplo el padre, a menudo, el gran excluído-, para mejorar el sueño, ya que con frecuencia la teta non-stop origina noches inacabables con decenas de despertares….Y mucho sentimiento de culpa cuando esa madre agotada, un buen día, ya no puede más. 

Entradas relacionadas

  1. La leche de vaca en la alimentación del bebé
  2. Lactancia materna en niños mayores o lactancia «prolongada»
  3. Los pediatras no apoyamos suficientemente la lactancia materna pero….
  4. Mi niño no me come
  5. Dificultades con la alimentación complementaria

Archivado en: En la consulta del pediatra Etiquetado como: alimentación, alimentación complementaria, consulta, crianza, desarrollo psicomotor, destete, educación, grupo de lactancia materna, lactancia artificial, lactancia materna, lactancia prolongada

Comentarios

  1. Anónimo dice

    12/11/2014 en 08:58

    Espero no ser la primera, aunque estoy segura de que no seré la última que como yo piense que podrías igual haber hablado del chupete, chuches, osito, mantita,… en el mismo contexto y situación. Un niño quizá enfermo, con fiebre, malestar, sueño, o simplemente,como bien dices, un niño cuya madre retrasa esa educación, esas explicaciones sobre la situación que va a vivir, o ya directamente un niño que está acostumbrado a conseguir lo que quiere cuando quiere… Que sea más o menos chocante (para tí) que lo que pida sea el pecho y no el chupete por ejemplo, creo que no da para escribir un post. Y probablemente si hicieras una estadística sobre los niños que montan el pollo en tu consulta, dudo mucho que los que toman pecho fueran mayoría, incluso me aventuraría a decir que saldría todo lo contrario.
    Estás hablando de una situación muy concreta en la que una madre no es capaz de manejar a su hijo (por el motivo que sea). Usar la lactancia "prolongada" (normal) como "ejemplo" no me parece acertado en un profesional de la salud. Porque probablemente de todas las cosas que se pueden usar para "distraer" a un niño, digamos, maleducado, el pecho sea el menor de los males (equivalente en un mundo ideal_normal_a un abrazo, un beso, una caricia, una mirada tranquilizadora…)

    Responder
  2. Anónimo dice

    12/11/2014 en 09:34

    Me encanta tu post! Y estoy totalmente deacurdo! Mi hija ha mamado hasta los 16 meses hasta que dije basta xq cada noche que pasaba erapeor q la del día anterior, ahora se enfrenta de otra forma a las cosas, respeto todo pero estoy de acuerdo con todo lo q has escrito!

    Responder
  3. maria dice

    12/11/2014 en 10:06

    ¿Y los niños que necesitan ser calmados con su chupete o su mantita o con un calcetin viejo como la hija de la infanta? ¿Porque siempre hay que estar demonizando la teta? Otro dia nos haces un post sobre estas otras "muletas" para calmar a los niños, un saludo

    Responder
  4. Anónimo dice

    12/11/2014 en 11:04

    Totalmente de acuerdo con el post. Y que cada un@ analice su relación con o sin la teta, no enriquece darse siempre por aludido en estas cuestiones.

    Responder
    • Anónimo dice

      12/11/2014 en 11:55

      Lo que no enriquece es atribuir siempre a la teta todos los males. Y muchos pediatras son muy dados a eso. Conozco varios casos en que se ha retrasado o equivocado un diagnóstico debido a esto, en problemas digestivos, intolerancias, enfermedades metabólicas entre otros. No me cansaré de repetirlo: para aprender nunca es tarde, y en esto de la lactancia falta mucha formación.

      Responder
  5. Anónimo dice

    12/11/2014 en 11:14

    Estoy de acuerdo con lo que dicen muchos comentarios… por quee la teta y no el osito, la mantita o pero auun, el chupete? Creo que con esta entrada has resbalado. Un saludo muy cordial.

    Responder
  6. Anónimo dice

    12/11/2014 en 11:19

    Suerte que nos decidimos por otro pediatra cuando en el Hospital de Nens nos dieron la primera visita de nuestro peque… Estaría siempre sufriendo por si juzga mi comportamiento en su siguiente post!! Quizás no ha sido muy afortunada esta publicación. Si, en vez de la teta, le hubiera ofrecido un juguete para calmarle, ¿también lo hubiera comentado? ¿Y qué problema hay en que la madre luego le pida consejo sobre cómo destetar? ¿No tiene derecho? Si usted misma opina que la teta quizás no es la mejor manera de calmar frustraciones (o es lo que se entiende en su post).

    Responder
  7. amaliaarce dice

    12/11/2014 en 11:58

    Gracias por vuestros comentarios. La verdad es que sabía que me exponía a comentarios airosos, es normal cuando se trata de un tema políticamente incorrecto.
    Creo que he intentado expresarme desde el respeto, y sin juzgar, simplemente a partir de cosas que observo. De hecho deciros que a algunas de las madres y sus niños en los que pensaba cuando escribía me une un profundo afecto y sé que a ellas también hacia mí.
    Respecto a lo que comentas Mariano de consultas más o menos fáciles, para mí no es un problema y no las considero unas visitas especialmente "difíciles".
    En ningún momento culpabilizo el gesto ni en la consulta ni en ningún otro foro, cada uno cría como quiere y puede.
    Podría haber hablado de otros "objetos" (chupetes, mantitas, similares, etc), sí, y en otras ocasiones lo he hecho, pero no era lo que quería explicar en esta ocasión.
    La idea del post no era molestar a nadie, por supuesto. Simplemente exponer algo que ocurre y sí, mojarme un poco. Por si a alguien le puede servir en algún momento, que es posible que sí, aunque no se atreva a opinar, por miedo a que se catalogue de pertenencia a uno u otro bando, algo que siempre me ha parecido innecesario.
    Un saludo

    Responder
  8. Inski dice

    12/11/2014 en 12:32

    Hola Amalia!

    Como tú dices, cada una hace lo que puede y en situaciones médicas que no ocurren con mucha frecuencia a veces es más fácil lidiar con la teta o con el chupete o con lo que sea. En nuestro caso particular, mi niña tiene 35 meses y hace poco teta pero en ocasiones que le superan me pide teta. En la mayoría de casos, me ha sido más fácil darle teta cuando la pide (no ofrecérsela para todo) y lidiar con el problema mientras ella estaba en un estado de relajación. Creo que nos ha sido muy útil porque cuando ese tipo de problema se le ha repetido, cada vez ha necesitado menos la teta y ha sabido lidiar ella sola con el problema. no sé si por simple maduración o por haberla acompañado en el proceso, con teta o sin teta.
    Aún así, creo que el post es adecuado, siempre desde el respeto (como creo que has hecho), porque no parece en absoluto que hayas demonizado la teta y en cambio puede ayudar a alguna mamás a pensar sobre ello. Con esto no digo que las mamás tengan que dejar de hacerlo si lo creen conveniente, simplemente que a veces hay cosas que hacemos por rutina y nos olvidamos de actualizar.
    Eso sí, no me gusta para nada la foto de esa portada. Busca el conflicto en todos los aspectos y el posicionarse en un bando u otro cuando no debería haberlos, como tú también dices.
    Un saludo!

    Responder
  9. Anónimo dice

    12/11/2014 en 13:14

    Pues mi hijo sigue tomando pecho A DEMANDA con 30 meses. Y a demanda significa a demanda, no cuando a mi me va bien, así lo decidí desde el principio y así lo he hecho. Si que hay momentos que si por lo que sea no puedo pues se lo explico, lo entiende y no pasa nada, pero eso no es lo normal. También tengo que decir que yo no trabajo y que quizá me resulte más fácil, supongo que dependerá de cada caso y de cada persona. La lactancia a demanda es preciosa, pero a veces agotadora, pero a mi me compensa con creces. Cada una tiene que hacer lo que le haga sentir bien a ella y a su hijo que son los que cuentan.

    Y en el caso en concreto de la consulta del pediatra no estoy de acuerdo contigo, yo a mi hijo le ofrecí el pecho cuando lo pedía. A veces no es el daño de una vacuna, es el miedo a lo desconocido, a si esta vez me harán daño o no, la ansiedad de verse desprotegido ante una persona que no conocen que los explora y hace cosas que no saben que son, a la postura de indefensión de estar estirado en una camilla solos (si lo hicierais en los brazos de su madre aún sin teta ya veríais que diferencia). Mi pediatra era reacia al pecho porque decía que habría situaciones en las que yo no estaría y el niño no tendría mecanismos, pues cuando no estaba y no tenia a mama se las apañaba perfectamente, pero si estaba le gustaba sentir mi contacto que lo tranquilizaba. Para mi es como un abrazo de tu pareja o un cogerte la mano, si lo tienes perfecto y si no pues tienes que apañarte, pero es como si tu pareja te dijera: no, no te abrazo porque te acostumbras y cuando no esté no podrás hacer frente a la situación, ¿sería absurdo no? para mi es lo mismo.

    Llegó un momento en que se acostumbró a la consulta, vio que no le hacían daño y confió más y ya no necesitó la teta para todo, pero fue él el que lo decidió cuando estuvo preparado. Te das cuenta de esta manera que sin tu hacer nada, sin ir a contracorriente, cuando están listos todo sale mucho más fácil y sin traumas por ambas partes.

    Responder
  10. Anónimo dice

    12/11/2014 en 13:29

    Pues lamentablemente, este post sólo puede servir para que alguien como yo, una anónima cualquiera, tenga que seguir escribiendo como anónima y dejar de dar pecho a mi hija de 2 años y pico en la sala de espera para que no piensen que es una malcriada. Ella a veces lo pide, a veces no, a veces le dijo que sí, y a veces que no,… es una niña muy independiente y poco dada a liarla en ningún sitio. Se le da el pecho como si le contara un cuento, se le diera un yogur, se le hicieran cosquillas o se le diera un chupa-chups (no eso no que no es nada sano). Que haya niños que no tienen suficiente con eso, que nada es suficiente, ese es otro tema… Pero bueno como llueve sobre mojado, en lo que a mí y a mi hija respecta, no pasa nada, puedes/pueden decir lo que quieran….

    Imagino que estigmatizar aún más la lactancia "prolongada" no era tu objetivo, Amalia, por eso ese tipo de anécdota en un blog como este tan seguido y respetado debería o bien quedarse en tu pensamiento o bien ser completada con otro tipo de anécdota no tan sesgada y limitada a la lactancia “prolongada” vs. niños sobreprotegidos/malcriados/tiranos/emmadrados o como quieras llamarlo.

    Responder
    • Anónimo dice

      15/11/2014 en 10:51

      Me parece que el problema no está en en blog, que expresa una opinión sin demonizar ninguna opción, el problema de sentirte mal está en ti. Tú estás segura de estar haciendo lo correcto? Es tu decisión libremente tomada? A tu hija le va bien? Pues sigue haciéndolo y no tomes como ley lo que es una opinión. O te importa más el que dirán?. Un problema de los muy partidarios y de los muy contrario es que cualquier opinión la entienden como una critica a su opción en vez de entender que, depende del caso, puede tenerse razón. En este post no se dice que " todas las madres que usen la teta para calmar a sus hijos en la consulta del medico están haciéndole mal a su hijo por crearles dependencia ", intenta decir que en ALGUNOS casos puede ser así. Que cada uno se plantee cual es su situación y si puede no estar haciendo lo mejor para su hijo..o si.

      Responder
  11. Anónimo dice

    12/11/2014 en 13:33

    Un post de lo más oportuno.

    Hemos pasado de todos los niños con biberón a todos los niños con teta hasta que ellos quieran.

    Los extremos son malo.

    Responder
  12. Anónimo dice

    12/11/2014 en 13:54

    Estoy totalmente de acuerdo con tu entrada, la verdad es que últimamente se ven y se leen sobre muchos niños con infinitos despertares por la noche debido a que están "enganchados" a la teta… Óbviamente no tengo nada que decir al respecto puesto que respeto el modo en que cada una decide criar a sus hijos, simplemente me sorprenden.
    Igual que me sorprendió el pasado sábado que durante una actividad en la biblioteca del barrio, para niños de entre 2 y 3 años, un par de nenas levantaran la ropa de sus madres para sacarles la teta en tres y cuatro ocasiones… la actividad duró 45 minutos escasos.
    Pero repito que cada cual educa y cría de la manera que le parece mejor aunque ésta no sea la que he escogido yo

    Responder
    • maria dice

      13/11/2014 en 14:15

      Los multiples despertares no se deben a la teta, sino a la imnadurez del sueño infantil (ver "Dormir sin lagrimas"de Rosa Jove) y que pasa que esta mal dar el pecho en publico? Que hay de malo en que los niños tomen teta en 45 minutos? Seguro que alguno habria con chupete, pero oh claro eso no esta mal visto

      Responder
  13. Anónimo dice

    12/11/2014 en 14:49

    Pues a mi lo que ha hecho ha sido liarme más.
    Jejeje, es verdad, no me ha quedado claro, mi hija tiene 18 meses y cuando vamos al pediatra ya empieza a refunfuñar en el aparcamiento, sabe a lo que va, en la revisión de los 18 meses, empezó a llorar en la sala de espera, no pudieron ni examinarla, aqui no es obligatorio que el pediatra te examine en esta visita, asi que no la obligamos, y se lo agredezco mucho a la pediatra , por que la.niña iba bien, solo era revisión, le pusieron vacuna conmigo al pecho, y hasta que no nos fuimos no calló. Yo se lo explico siempre, pero creo que es muy pequeña para entender que es por su bien. No conocemos mucho al pediatra, solo vamos a las revisiones, gracias a que no suele enfermar y espero que siga asi. Yo entiendo toooodaaasss las posturas, solo hay que ponerse en el pellejo de las personas, y en mi caso personal la teta lo es todo, mi hija no tiene chupete, ni biberón, ni manta, ni muñeco especial, tiene teta, hasta que ella quiera y por lo que veo no nos queda mucho, unos pocos meses, por que ya empiezas a ver que quiere menos.
    Pero cada una es cada una, y lo que se dice con respeto, bien dicho esta Amalia, yo no se, si sera mejor o peor seguir con la teta, pero es que antes hay muchas cosas que me preocupan muuuuuchoooooo mas.
    Un saludo

    Responder
  14. Anónimo dice

    12/11/2014 en 14:57

    La teta siempre molesta. Molesta porque implica madre pegada al niño y piel ajena de por medio. Sigue siendo un problema incluso para una profesional que defiende la lactancia. A nadie le molesta El Niño con chupete en la consulta.

    Responder
  15. amaliaarce dice

    12/11/2014 en 15:20

    Algunos comentarios:
    – Yo no he hablado de niños malcriados en ningún lado….
    – Ni en realidad estaba hablando genéricamente de lactancia prolongada…
    – Ni tiendo a la autocensura….porque precisamente que el blog sea "respetado" y "seguido" seguramente es porque aquí cabe mucha gente mientras se traten los temas con respeto…eso intento yo por lo menos.
    – A mí la teta no me molesta….ni creo que sea para mí un problema….
    – Hoy no hablaba de chupetes, pero creo que también he opinado en otras ocasiones sobre ellos. En un niño que ya sabe hablar, lo primero que le digo en la consulta es si me cede su chupete.
    Insisto en que hoy no se hablaba de otros objetos, pero sinceramente creo que teta y chupete no son "objetos" (y lo pongo entre comillas…) comparables…en eso creo que estaremos de acuerdo.
    Saludos

    Responder
  16. Irene y Umpa Lumpa dice

    12/11/2014 en 18:21

    No soy madre, así que sólo opino como bloguera que lleva siguiendo este blog años. Que me ha hecho ver la pediatría desde otro punto vista y que en algún momento ha hecho que me interese por la especialidad en el futuro muy próximo ya, quién sabe.

    Leo blogs de muchos tipos: de entretenimiento, de gatos, de actualidad, de medicina, de relatos, de maternidad…

    Y no sé qué pasa con la lactancia que siempre genera una ola feroz de comentarios. La mayoría de las veces quejándose del poco respeto a la lactancia por parte de viandantes, pediatras, etc. La verdad es que todos mis profesores de pediatría nos han hablado muy bien de ello. Los médicos con los que he rotado, igual. Sin criminalizar, el neonatólogo con el que iba siempre lo recomendaba habitación por habitación (igual que recomendaba no dar chupete los primeros 15 días para instaurar bien la lactancia) Recomendaba. No imponía. Tenía una formación amplia sobre lactancia, y tanto una matrona como una de las pediatras tenían una formación más "oficial" que no recuerdo el nombre. Igualmente, parece que ahora el pediatra tampoco puede dar consejos de alimentación (como si eso no fuera parte de la salud del niño) Reitero… CONSEJOS y muchos de ellos con formación amplia en el tema.

    Por otra parte, esta entrada es un ejemplo más en el que nombrar la palabra lactancia con una míiiiiiinima crítica en una situación muuuuuy concreta y ofreciendo una alternativa que creo que todos vemos claramente mejor, se llena, en general de comentarios de "aludidas"… cuando, por lo que he visto, se criminaliza mucho más lo contrario (dar biberón en la primera semana de vida, por ejemplo)

    Y sí, tenéis razón con lo del chupete. Poned la palabra en el buscador de entradas y encontraréis un montón que hablan sobre el tema. Simplemente esta llevaba otra temática.

    Un abrazo

    Responder
    • Anónimo dice

      13/11/2014 en 09:41

      Estoy totalmente de acuerdo con el ultimo comentario. Es decir teta y saltan algunas madres como "lobas" a la defensiva. Nadie debe ni obligar ni juzgar a una madre por dar o no dar el pecho. Por que no es mejor elegir libremente? No hay madres de primera ni de segunda todas queremos a nuestros hijos por encima de todo. Yo he sido juzgada por querer dar un biberon a mi hijo en el hospital y despues por las madres prolactancia hasta hacerme sentirme mala madre. Y eso que hice lactancia mixta cosa que no volveria a hacer desde el primer minuto biberon y al que se le ocurra juzgarme lo mando lejos.
      A mi si me ha gustado esta entrada y si estuviera cerca ella seria la pediatra de mi hijo sin ninguna duda.
      ah!!! por cierto cuando voy a las revisiones con mi niño siempre se las hacen en brazos de su madre realmente no es un niño querido? no se siente protegido? Y otra cosa yo nunca dejare de ir al pediatra con mi hijo ni por trabajo ni por el medico. Soy su MADRE y si no me gusta el medico o lo cambio o le pongo en su sitio pero siempre estare ahi.
      Eres muy valiente Amalia sigue asi.

      Responder
    • Anónimo dice

      13/11/2014 en 14:55

      Pues no es por nada pero, es decir biberón y tu has saltado como una ¿leona? (ya que las q dan el pecho son lobas). ¿Quién ha hablado de madres de división alguna o de que las madres q dan el bibe son malas o poco cariñosas?
      Con un comentario como el tuyo, no haces más q demostrar q las madres son muy sensibles a cualquier tema relacionado con sus hijos, y una comunicadora como Amalia corre el riesgo de q sus comentarios se interpreten de una manera que ella no pretendía (1a regla de la comunicación: si el mensaje no se entiende, el problema es del emisor) y de que la blogosfera se manifieste a favor o en su contra. No, no hay madres de segunda, pero créeme, sí muchos prejuicios contra dar de mamar, por eso existen grupos de lactancia y no grupos de biberón 🙂

      Responder
    • Anónimo dice

      14/11/2014 en 08:55

      es la primera vez que escribo. Hay veces que estoy de acuerdo con ella y otras no. Las madres prolactancia saltan al cuello a la minima si tan bueno es no se necesitaria defender tanto y lo mejor seria informar sin coaccionar sin juzgar.
      Lo de madres de primera y de segunda es una mencion al libro de Amalia que ahi si lo comenta y estoy muy de acuerdo con ella.
      A mi me parece genial que las madres del pecho donde y como quieran igual que me lo parece que den un biberon. No soy quien para juzgar pero si que a mi las prolactancia me juzgaron

      Responder
  17. arya dice

    13/11/2014 en 06:28

    Que pena de post, me has decepcionado mucho. Demuestra una enorme ignorancia sobre psicología infantil, antropología y salud. Te animo a que te informes.

    Responder
  18. Maria dice

    13/11/2014 en 08:48

    Totalmente de acuerdo con el post Amalia siempre tan clara y acertada.
    Aparentemente este un tema muy sensible, a juzgar por los comentarios. Por lo que he leido sobre la lactancia prolongada o como quiera que se llame tiene mas beneficios para la madre que para el niño???? habra tambien un poco de "asi me siento imprenscindible"? Sinceramente para mi un niño de 3 años ni teta ni chupete!

    Responder
  19. Anónimo dice

    13/11/2014 en 09:39

    No entiendo los 26 comentarios… Miras hacia atrás, como las maravillosas entradas por tu padre y tu hija…y nada, en cambio das tu opinión de un Extremo y todos a opinar.
    Nunca suelo opinar en tus entradas, pero me parece que esta siendo demasiado para una persona que nos ayuda tanto en el día a día de informarnos en como ser mejores madres por lo menos desde el aspecto sanitario y ver la otra cara, la personal, de la persona que nos atiende. Amalia, siento que sea justo en esta entrada, pero MIL VECES GRACIAS, por este post y por todos los demás

    Responder
  20. Anónimo dice

    13/11/2014 en 09:41

    Hola,

    Desde mi experiencia, 50 meses de lactancia con mi hijo (hasta el mes pasado), el post no me ofende en absoluto, siempre he tenido claras mis ideas de colecho, con 3 años quiso tener su cama, comida y lactancia, siempre le hemos explicado las cosas como son, en consonancia con su edad, y aunque es culo inquieto, nunca hemos tenido problemas con la consulta del pediatra o cualquier otra, porque procurábamos anticiparnos a las situaciones, desde pedir ser la 1ª consulta si era revisión para no tenerlo allí mucho tiempo, hasta llevar libros de pintar, pegatinas, cuentos, tablet, coches, etc, recursos varios, pertenezco a una asociación de lactancia, y he visto lo que relatas en muchas ocasiones, creo que ofrecer teta para calmar está bien, pero también hay que explicar y enseñar a afrontar las situaciones de otro modo, he visto muchas mamás que cuando se acaba la teta se ven sin recursos y no saben cómo afrontar las situaciones, desde un respeto mal entendido por el niño no saben decir no o establecer unas normas, hay que educar a los niños en la convivencia también y respeto por los demás, y cuanto antes aprendamos a afrontar situaciones con distintos y variados recursos posibles mejor.
    Saludos cordiales,
    Verónica

    Responder
  21. Marian dice

    13/11/2014 en 10:11

    Hola, Amalia
    Te sigo desde hace mucho tiempo, pero no había escrito antes. Pero hoy quisiera intervenir, ante la oleada de barbaridades que se han dicho a raíz de tu post. Creo que has sido respetuosa y clara, pero a algunas lectoras que se han sentido aludidas y les ha fallado la comprensión lectora. Han leído lactancia prolongada y ya se han disparado. En ningún momento Amalia ha criticado la lactancia prolongada ni sus diversas funciones. Lo que ha expuesto (y sin imponerlo, sólo como consejo), es la necesidad de enseñar a los niños a resolver conflictos ante determinadas situaciones. Que dar el pecho está muy bien, pero que a veces también, por el bien del niño, está bien recurrir a otras medidas para que superen miedos y frustraciones. Para mí está bien clarito lo que ha explicado. Pero, ¿qué sucede? ¿No hay alternativas a dar el pecho para la resolución de conflictos? ¿Si se ofrecen otras medidas ya se es mala madre?

    Responder
  22. Mertxe E. dice

    13/11/2014 en 10:37

    Supongo que es algo que ya esperabas cuando escribiste esta entrada. Es inevitable, porque todavía existe mucho desconocimiento sobre la lactancia y las que damos de mamar tenemos que aguantar miles de comentarios al respecto. Mi bebé tiene 6 meses recién cumplidos y se supone que la base de su alimentación es la leche, materna en este caso. Pues bien, desde el inicio estoy harta de oír cosas como: ¡Cochino!, o ¡Marrano!, ¡Que estás todo el rato mamando!, ¿Y no le das cereales? (desde hace 2 meses), etc.
    Alguna vez que le he tenido que dar de mamar en la calle, las miradas de algunas personas son de traca. Por no hablar de las salas de lactancia tipo zulo de algún centro comercial, por ejemplo.
    Y es inevitable sentirse aludida, ¡claro! Mi peque, por ejemplo, es de los que se despierta cada hora u hora y media para mamar. Pasó de repente y llevamos así ya dos meses. ¿Es culpa mía por darle teta? Se podría desprender eso del final del post y del comentario de alguna lectora.
    En fin, que es un tema sensible, por el desconocimiento que se tiene todavía del tema, como he comentado al principio, y algunos comentarios tuyos, aunque creo que no era tu intención, Amalia, dan alas a esas personas desinformadas (sólo hace falta leer algún comentario) y, quizás, hieren sensibilidades de madres que hacen lo que mejor saben o pueden. Aunque no estabas atacando a la lactancia prolongada, esa cosa de jipis (jeje!), lo parecía.
    ¡Exijo un post redentor! 😉
    Mertxe E.

    Responder
  23. Anónimo dice

    13/11/2014 en 14:51

    Ay,Amalia, que le ha caído por ser usted "políticamente incorrecta". Y esto que siempre intenta usted ser de lo mas prudente y respetuosa con sus opiniones. Pero, ánimo, la autocensura es un peligro mayor que la perdida de algunos lectores que, aunque nos hablen a toda hora de tolerancia y diversidad, se muestran tan radicales y soberbios cuando leen algo que no les gusta. Sí, señoras (supongo que somos mayoría), es mucha soberbia decirle a alguien como y que tiene que escribir en su propio blog, atacando todo un trabajo, no olvidemos, voluntario, porque por una vez no se esta de acuerdo. Soberbia y peor.
    Y ahí va mi humilde (y cobarde, por lo del anonimato) opinión: estamos criando generaciones de futuras personas que pasarán de la teta al Prozac. (Pongan en lugar de teta lo que os apetece, estimados/as lectores/as: chupetes, bob esponjas o lo que sea). Porque parece que con tantas teorías de parenting y mal entendidos conocimientos de antropología (a la que,ni mas, ni menos se refería una lectora), se nos olvida que el niño tiene que aprender poco a poco a manejar la frustración. Porque esta es parte de la vida, estimadas co-lectoras. Y el aprendizaje, en general, no empieza cuando nos parece a nosotros que el niño "entiende", empieza desde el primer día.

    Responder
    • Anónimo dice

      13/11/2014 en 18:59

      Expresar opiniones contrarias no creo que sea ser soberbio. La Dra. admite comentarios en su blog y ya sabe que, a veces, las lectoras y los lectores, que haberlos haylos, discreparán. Hay temas que dan más juego que otros y este es uno de ellos. Entiendo que todo el mundo opina desde el respeto y la humildad. Si no, ya está la moderadora para bloquear el mensaje si lo cree oportuno.
      Por cierto, el Prozac existe desde hace más de 25 años para tratar la depresión de niños criados con otros métodos de crianza. Dudo mucho que por entretener a un niño que no es más que eso, un niño, con la teta, un biberón o un juguete, vaya a desarrollar en el futuro un cuadro depresivo.
      Humildemente, desde el respeto y con un poco de humor.
      Otro anónimo.

      Responder
  24. Anónimo dice

    13/11/2014 en 15:18

    Pues genial!! Amalia, acertadisima, enhorabuena. Yo soy pro lactancia prolongada, pero destete en el momento en que vi que la necesitaba para todo y era su quita frustraciones inmediato. Con 2 años.

    Ahora es un niño mas autónomo, con mas aguante, duerme y come mejor, en definitiva, tanto su padre como yo lo vemos mas feliz. Los extremos no son buenos, una vez que la lactancia está establecida lo fácil es mantenerla, pero casa niño es un mundo y hemos de adaptarnos a su evolución. Es nuestra responsabilidad.
    Maria

    Responder
  25. Caro dice

    13/11/2014 en 18:40

    Hola tengo un bebé de dos años y todabia le doy teta pero es verdad k solo al levantarse por la mañana y para dormir.
    En la revision de los 18 meses y la de los dos años el pediatra me hizo la pregunta " ya no toma leche materna no? " y yo me qude de piedra pork era como si lo diera por verdad y cuando le dije k si me responde " jumm ps entre más tardes en kitarsela peor es " entonces yo no entiendo pork se recomienda hasta los tres años???

    Responder
  26. buena idea para otro post dice

    13/11/2014 en 19:22

    ¿Antropología? ¿Y eso "qué es lo que es"?…. Así vamos como vamos, y estamos dónde estamos.

    Responder
  27. amaliaarce dice

    13/11/2014 en 19:35

    Si os parece lo dejamos aquí. Creo que los dos "bandos" se han expresado convenientemente, aunque en realidad no era esa la intención del post.
    He aprendido mucho con todo lo que se ha expresado por aquí en las últimas 36 horas.
    Sigo pensando que desde el respeto se puede manifestar la opinión que sea y que la censura -y especialmente la autocensura- mata a la esencia de lo que es un blog. Suficientes cosas en la vida, ya se tiene que callar una públicamente….
    Animo a los que se amparan en el anonimato para no tener pelos en la lengua a escribir de forma ininterrumpida durante casi 6 años y poniendo la cara y el nombre cada vez. Da otra perspectiva.
    Como creo que el debate ya empieza a ser estéril, y ya empieza a basarse en descalificaciones personales de unos y de otros, de momento este post no tendrá más comentarios.
    Saludos a todos

    Responder
  28. marita dice

    14/11/2014 en 22:09

    Te agradezco que hayas escrito este post, Amalia. A pesar del aluvión de críticas de aludidas y de los "y tú más" posteriores.
    En la crianza de nuestros hijos no hay dogmas, lo que es bueno para uno en un determinado momento no tiene porqué ser lo mejor en absolutamente todas las situaciones.
    Creo que en la crianza somos los padres los que debemos tomar las riendas, debemos informarnos, ser críticos con la información, pero a la hora de la verdad la responsabilidad es nuestra.

    Responder
  29. W&M dice

    14/11/2014 en 22:48

    Hola, hace mucho que no pasaba por aquí (no por no querer, sino por falta de tiempo). A mí también me ha sorprendido esta entrada, no por el tema, que no me molesta, ni tampoco me parece un mal tema para discutir, aunque no estoy segura de que utilizar la teta para calmar al niño/a (no bebé) pueda ser dañino para su desarrollo. Yo hubiese hecho el post sobre las madres y padres que utilizan la tablet o el móvil; eso sí me parece dañino. Pero entiendo el punto del post! De verdad que sí, y lo comparto. Para mí el problema está en el último párrafo:
    1. "muchas de ellas": ¿es una conducta tan común entre las madres que dan pecho como indica esta expresión? Esto es una expresión que generaliza.
    2. Lo de la teta non stop y las noches inacabables con decenas de despertares: imagino que las mamás que no dan pecho, dan chupete, y por eso ellas no se quejan. Al menos hasta que llega el momento de sacarle el chupete. Por otro lado, para mí el problema no está en el pecho, está en la manía de poner el niño/a a dormir sólo. Nosotros dormimos todos juntos: ni me entero cuantas tomas hace, y duermo mucho mejor que antes de ser madre. De verdad pienso que si el colecho no estuviese censurado, las madres podrían dormir mucho mejor. Me parece injusto para nosotras las mujeres.
    3. Los padres: yo no sé los demás, pero nuestro papá entiende perfectamente que antes éramos 2, y ahora somos 3, y que además la tercera es una bebé que toma teta, por lo tanto, la vida del papá giró 180 grados. Y la de mamá por supuesto también. La mamá ya no es una persona libre e independiente, la verdad… yo ya no puedo involucrarme en una conversación adulta si mi hija nos acompaña: no puedo sacarle la vista de encima (está en la fase gateo), y es una lástima para los demás, la verdad (como conversadora era muy buena), pero forma parte del paquete. Tras la llegada de la niña ya no puedo salir como antes, ya no puedo tener sexo como antes, ya no puedo disponer de mi tiempo como antes (ni para mi sola, ni para los demás)… Nuestro papá, y yo, aceptamos esto porque este es el paquete bebé. Tenemos nuestro momento diario desde que se duerme hasta su primer despertar. Cuando sea más mayorcita, recuperaré esos espacios. La verdad tampoco tengo tanta prisa. Es una etapa de mi vida, una faceta de mi misma.
    4. Y por último la última frase: yo, madre agotada, espero durante todo el día con gran deseo el reencuentro con mi hija para darle el pecho, después de largas jornadas de trabajo. Sí, a veces estoy agotada, igual que su padre, pero no por darle la teta a mi hija (que más bien, me permite disfrutar de los pocos momentos de descanso que tengo), sino por estas jornadas y horarios incompatibles con la crianza. Por eso tener hijos en este siglo se ha convertido en un lujo para unos pocos, o en un gran sacrificio para muchos padres agotados.
    Y después de esto, resumo: de verdad, el post está bien, es una buena reflexión, pero el último párrafo no, el último párrafo sí me pareció poco objetivo. Podría seguir escribiendo! Sería muy interesante charlar contigo en persona, de verdad. Un saludo y gracias por este espacio para escribirte y por el blog como siempre!
    María Augusta Rodrigues

    Responder
  30. Clara dice

    15/11/2014 en 19:59

    Hola Amalia ( y otros, si decides publicarlo, entiendo que esto se ha ido de lo razonable y prefieras no colgarlo; además me ha salido largo y lo recorto en dos partes porque el formulario no me deja tanta literatura)
    Primero, soy madre de teta, de mucha teta, de lactancia en tamdem durante los 3 años que lleva mi pequeño con nosotros. Y madre de lactancia mixta con el primero porque pasé un bache y perdía peso. Me busqué un relactador y daba la teta con apoyo. En fin, como madre atípica entre las "supertetas" y las "ni de broma" he tenido comentarios desagradables de ambos bandos. La falta de respeto a las circunstancias y valores de la madre que es cada una viene de todas partes.
    A día de hoy, cuando alguna amiga me quiere escuchar por mi experiencia, no doy ni consejos, sólo cuento eso, mi experiencia. Mi experiencia lo único que me ha llevado a creer es que las maternidades son infinitas, pero todas costosas; que se necesita buena compañía y que me gustan los grupos de madres, porque el intercambio con alguien que tiene circunstancias parecidas es genial. Y no debería ser exclusivo de los grupos de lactancia. Todas tenemos dudas y a la que nos descuidamos sentimiento de culpa. No sé si de estas dudas y culpas salen estas actitudes tan irrespetuosas con otras madres, como autodefensa. Me parece un error en general.
    Segundo, nunca me ha ofendido un post tuyo. Aunque en ocasiones no me parece todo tan estupendo y discrepo, siempre me ha gustado que des la información separada de la opinión. Eso es algo que intento siempre hacer cuando doy clase (soy profe) y también en esto de los apoyos entre madres y otros ámbitos. A menudo me ha sido muy útil y tranquilizador leerte. Gracias por la sinceridad y por favor nunca te autocensures.
    Tercero, al lío. La educación emocional es una asignatura pendiente en familias y escuelas. No sabemos cuál es el objetivo en este ámbito, no tenemos siquiera claro que haya una educación de las emociones. No es la teta, ni el muñeco, ni el chupete: es la dependencia. A veces la teta se usa dentro de un contexto de buena educación emocional y otras veces al contrario. A veces desde fuera desconocemos completamente la situación emocional de los peques a los que dan teta o chupete. A veces incluso esas muletas que se tienen ni siquiera son obvias y no opinamos sobre ellas, pero ahí andan y son igual de evasivas. Yo a mis hijos he intentado darles herramientas ante sus conflictos, esencialmente nombrando lo que a mí me pasa y lo que les pasa a ellos e intentando desarrollar el vocabulario de este ámbito para poder expresar las cosas y de este modo afrontarlas e intentar resolverlas. También intento estar ahí, que sepan que estoy, que no me voy a retirar cuando me necesiten. Y cuanto más pienso en ello, menos segura estoy de haberlo hecho como debo. Es un campo de mucha incertidumbre.

    Responder
  31. Clara dice

    15/11/2014 en 20:00

    (…continua)
    Y también en muchos centros de salud lo de las emociones se lleva de aquella manera. Yo he llevado a mi hijo a vacunar, le he dicho que el pinchazo podría doler y que yo le consolaría y apoyaría, que no me importaba que llorara si le dolía y que le ayudaría a calmarse. Todo esto lo repetí delante de la enfermera. Me molestó sobremanera que le dijeran que le daban un caramelo si no lloraba, que le dijeran que no iba a doler para que se estuviera quieto… Independientemente de que mi enfoque o el suyo fuera el mejor (suelo ir por el lado de la sinceridad, pero puedo equivocarme), los mensajes eran contradictorios. Simplemente no tenemos cultura de cómo enseñar a afrontar situaciones desagradables ni de comunicarnos en el plano emocional. Seguramente se podría hacer un esfuerzo y aprender, especialmente en este momento en que la medicina ha superado los principales retos científicos y tiende a humanizarse. Pero los recortes no parece que sean compatibles con cursos de formación en estos ámbitos. Al menos algunas personas intentamos estar atentos a todo esto y mejorar en lo que podamos.
    En realidad, de las visitas pediátricas no puedo quejarme en el trato a los niños, siempre se han sentido escuchados y atendidos. Es más bien en las vacunas, que sabemos que son dolorosas, donde he tenido conflicto. Y a lo mejor es que los adultos no tenemos tampoco todas con nosotros en cuanto a enfrentarnos a los dolores y frustraciones, y pocas cosas son tan difíciles de afrontar como el llanto desconsolado de los niños a los que les has hecho daño. Creo que no hay que "parar" el llanto a toda costa, sino acompañarlo un poco, empatizar hasta donde se llegue… y se termina de forma más natural, sin tener que esconderlo. Pero como digo, cada día me siento menos dueña de las verdades, ¿estaré haciendo niños llorones? ¿seguiré teniendo paciencia toda su infancia? ¿no sería mejor tener una actitud más parecida a la de su maestra?

    Ya lo dejo que por poco hago testamento vital. Un abrazo y sigue en tu linea. Gracias por estar ahí, haciendo tu trabajo y además comunicando.
    Y en plan off topic, gracias por las personas a las que has reanimado y por las personas que reanimaron los que aprendieron a hacerlo contigo. Seguro que acabas volviendo a hacerlo, todo se acaba encajando en su sitio con el tiempo, y si no, ya es mucho lo que se hizo.
    Puedes recortar el mensaje por donde te parezca si decides publicarlo, que es muy largo.

    Responder
  32. Laia dice

    16/11/2014 en 07:53

    Hola Amalia,
    Ya sabes, aún no me ha tocado ser madre. Opino como educadora y como amiga que soy de diferentes madres que han elegido diferentes opciones (biberón, lactancia, lactancia prolongada…) y que se han encontrado con extremistas en ambos bandos. Y mira, me aburren hasta límites insospechados los comentarios de personas que se sienten atacadas por opiniones que en ningún momento tenían esa intención (de ambos extremos).
    Estoy totalmente de acuerdo con tu post y con tu forma de expresarlo. Creo que lo explicas con respeto y sin demonizar nada ni a nadie.
    Gracias por "mojarte", no dejes de hacerlo, por favor!
    Salud!

    Laia

    Responder
  33. ElenaLorente dice

    18/11/2014 en 08:01

    Hola Amalia,
    A pesar de los años que llevo siguiéndote, creo que solo en un par de ocasiones me he lanzado a comentar algún post.
    En mi caso, soy mamá de dos soles, al primero solo pude darle pecho 1 mes y medio, sin embargo la segunda estuvo mamando 4 años y medio. A pesar de las diferencias entre ambos en tema de alimentación, como madre y echando la vista atrás, sé que hice lo que consideraba mejor para mis hijos en aquel momento y con aquellas circusntacias.
    ¡Qué dificiles nos lo ponemos a veces a nosotras mismas!
    No hay malas madres, hay diferentes formas de entender la maternidad.
    No hay peores formas de crianza, hay diferentes familias con diferentes filosofías y diferentes circunstancias.
    Ojalá, llegue el día en que dejemos de ponernos la zancadilla y simplemente respetemos, escuchemos y si se nos pide, aconsejemos.

    Responder
  34. Paula dice

    19/11/2014 en 06:32

    Hola,

    Te sigo hace tiempo y no me siento ofendida, yo entendi el mensaje como el uso de la teta como la única herramienta de consuelo cuando ya pueden entender otros métodos, y estoy de acuerdo.

    Tengo dos ninos (5 y 2) con lactancia prolongada, así que se por experiencia que es un método fantástico que he usado y uso en diversas ocasiones, de hecho cuando el mayor tuvo terrores nocturnos fue lo único que lo logro calmar (ni palabras, ni abrazos ni nada mas). Pero si bien al principio cuando se caía en el parque buscaba la teta de consuelo, de a poco y gentilmente introduje abrazos, "auchi stickers"y otros métodos para consolarlo.

    Mientras mas herramientas de apoyo a su desarrollo emocional podamos tener creo que es mejor, y la teta es reina, pero no por eso tiene que reinar sola

    Responder
  35. Anónimo dice

    24/11/2014 en 00:54

    Debo ser la única que piensa así pero he de decir que di el pecho porque me vi tan presionada que no me quedó otra opción. Soy médico también. Sinceramente no me parece tan importante desde el punto de vista inmunológico ni afectivo pero la presión es tan enorme que o lo haces o te critica todo bicho viviente. Resultado, una lactancia mixta donde el niño mamó como si usara chupete hasta que a los 4 meses volví al hospital y el malestar de tenerle que arrebatar la teta para irme a trabajar y hacer guardias y tardes, cuando yo ya sabía que no cuadraba con mi estilo de vida.
    Ahora, embarazada de nuevo, me enfrento a lo mismo.
    Gracias por el blog y el post.
    Blanca

    Responder
  36. La Doctora Impaciente dice

    26/11/2014 en 11:12

    Pues si has levantado ampollas con el tema doctora, pero es que actualmente esta muy defendido el tema entre las madres con lactancia prolongada… y creo que la gente se ofende con facilidad sin tener en cuenta que cada uno puede optar por lo que le de la real gana mientras esté informado.

    Me parece muy buen post para reflexionar. Me he dado cuenta ahora que he sido madre de lo complicada que es la relación con la teta y lo poco idílica que es para mi en realidad. Es lo mejor si, pero no mi hija no estaría falta de amor, nutrientes y conexión conmigo si hubiera acabado dando biberones.

    Yo tambien defiendo la lactancia materna pero sin demonizar la leche artificial ni el destete cuando la madre lo crea conveniente.

    Tienes un blog maravilloso, sigue así.

    Responder

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Buscador

Archivo anual

Nube de etiquetas

adolescencia alimentación Asociación Española de Pediatría blog blogosfera maternal blogosfera sanitaria calendario vacunación colegio conciliación consulta crianza cumpleaños desarrollo psicomotor educación embarazo enfermedad familia fiebre guardería guardia hospital Hospital de Nens internet lactancia materna lactante libro madre maternidad médico niños padres parto pediatra prematuridad recién nacido redes sociales relación médico-paciente salud 2.0 trabajo twitter Urgencias vacaciones vacunas varicela virus

Entradas recientes

  • Sarampión en Europa, ¿qué está pasando?
  • Meningitis y vacunas contra la meningitis
  • Tecnopatías en la infancia: ¿hacia dónde vamos?
  • Las 3 edades de la maternidad
  • The future is female but…

Servicios profesionales

Médico pediatra de formación y ejercicio, llevo desde el año 1999 visitando a los niños y a sus familias.

En el año 2009 empiezo a investigar y aprender en el mundo digital aplicado a la salud, incrementando mi experiencia en el uso de las redes sociales, el márketing digital y la agilización de procesos gracias a las nuevas tecnologías, así como su impacto en la gestión sanitaria.

¡Te puedo ayudar en tu proyecto!

Consulta de Pediatría

Mi consulta de Pediatría está en Món Pediàtric en Poblenou. Visito en diferentes franjas horarias, a horas convenidas. Contacta en el 93.823.55.82 para concertar tu cita.

 

Seguir leyendo

Contacta conmigo

Si quieres ponerte en contacto conmigo puedes escribirme un e-mail a diariodeunamamapediatra@gmail.com

También puedes encontrarme por las redes: En twitter soy @lamamapediatra y mi página de facebook es también «la mamá pediatra«

Agenda. Próximos eventos

11 noviembre  – 4ª Trobada Pediàtrica Solidària Fundació Hospital de Nens de Barcelona. Presentación: «Mitos y leyendas en Pediatría».

16 noviembre – Consultorio Suavinex en las redes sociales

18 noviembre – Crianza entre pantallas. Sesión para familias en el Congreso de la Sociedad Española de Pediatría Social. Casal Cívic Ca n’Aurell. Plaça del Tint, 4. Terrassa.

16 enero 2018 – TIC para pediatras. Sesión Servicio de Pediatría Hospital Joan XXIII

 

Suscríbete a mi newsletter

Advertencia

Esta web está dirigida al público general con finalidad de divulgación sanitaria.

La información que puedes encontrar puede apoyar o complementar pero nunca sustituir la información que puede transmitirte tu pediatra en la consulta.

Dra. Amalia Arce - Algunos derechos reservados - Política de privacidad y cookies

Al utilizar nuestro sitio web, usted consiente el uso de cookies de acuerdo con nuestra política de privacidad. Más información

Cerrar