El pasado jueves planteaba en esta misma página en el post anterior a este si los padres nos mentían en la consulta….y para ello me atrevía a confeccionar una pequeña encuesta que en el momento de escribir esta entrada, casi 700 personas han contestado.
Ante todo muchas gracias por vuestra participación desinteresada tanto en la encuesta como en los e-mails que me habéis enviado. Voy a compartir con todos vosotros los resultados.
El resumen viene a ser que aproximadamente un 30% afirman no mentir jamás al pediatra, mientras que el 70% restante se dividen entre los que afirman que le mienten habitualmente, los que le mienten ocasionalmente y una mayoría que dicen no mentir pero no decir toda la verdad.
A la pregunta sobre cuáles son los temas principales en los que se miente, sobretodo las mentirijillas versan sobre la alimentación y en menor medida sobre los hábitos y las rutinas y el sueño, siendo la mayoría más comedido si se trata de enfermedades.
Por último el motivo principal para mentir es saber o intuir que el tema a tratar era un tema en el que el o la pediatra estaba en desacuerdo con la opinión de la madre o el padre. No obstante, muchas personas también sentían sentirse juzgados o sentir vergüenza diciendo la verdad.
Tengo que confesaros que me he echado unas buenas risas viendo cómo iban las estadísticas y leyendo algunas de las mentiras que me habéis confiado.
Por otro lado, el tema da para mucha reflexión para unos y para otros, pero por la parte que me toca, creo que deberíamos tomarnos en serio el por qué en una relación de adulto a adulto -como me decían en algún comentario- y que debería estar basada en la confianza, ocurre eso y qué podemos hacer los profesionales para mejorar la parte que nos afecta….
Creo que la comunicación es una asignatura pendiente en muchos de los ambientes médicos (y otros, pero la medicina afecta mucho a las personas). Me he intervenido el sábado en un quirófano que para mi agradable sorpresa tenía un "informador". Simplemente una persona que daba las noticias a la familia, acompañaba al paciente de la sala de espera a la zona de quirófanos, se preocupaba de dar tus mensajes arriba y abajo… Creo que ese es un campo en el que podríamos mejorar mucho, y que con un esfuerzo comparativamente pequeño podría hacer la experiencia de los pacientes y familiares (por ejemplo en urgencias los familiares suelen sufrir) mucho menos traumática y propensa a reclamaciones.
Con respecto a los pediatras y enfermeros de pediatría (lease en neutro, no en masculino) a mí me ha resultado alguna vez un poco frustrante que no sean sensibles al tipo de educación que quiero dar yo a mis hijos. Las últimas vacunas pasé toda la consulta intentando aceptar y consolar a un hijo con un dolor mientras la enfermera le daba caramelos "pero si no lloras" o le juraba que no dolía, que poquísimo… Puede que la mayor parte de las familias prefieran el otro enfoque, pero pedí explícitamente que le dijeran la verdad, que duele un poco pero que merece la pena porque no te pones "tan malito" con las enfermedades.
Como profe reconozco que es dificilísimo tratar a las familias, enfrentar un entorno protocolarizado de institución con unas espectativas y unas relaciones personales en las familias (en mi caso de adolescentes, complejas al máximo); y también reconozco que no somos tan flexibles y empáticos como deberíamos. Es una asignatura pendiente de nuestra sociedad, aprender a comunicarnos mejor.
No has visto House? todos mienten….Un saludo.
Quizá no juzgar, intentar comprender y aconsejar sin forzar. Es bastante triste que tenga que ser así.
Yo soy de las que voté que nunca he mentido a la pediatra de mi hija, aunque tampoco miento nunca a mi médico. Soy abogada y lo peor que me puede pasar es que un cliente me mienta (que ha sucedido) así que prefiero una "bronca" que un mal consejo derivado de una información falsa. No le veo sentido a ocultar algo a la persona que está para ayudarnos. También es cierto que la pediatra de mi hija es un encanto y sé que si algo no le gusta lo corregirá sin resultar ofensiva así que es más fácil contar la verdad.
Por cierto y ya sé que no viene a cuento, ¿por qué todo el personal médico tiene la manía de llamarme "mamá" si tengo un nombre propio?
Buenisimo. A mi tambien me llaman mama!!